Te conozco más de lo que crees. Todos los días te veo en cada calle, en cada esquina, en cada casa...en cada rostro. Te escribo porque estoy cansada de ti. Estoy cansada de conocerte tanto y de leerte tanto que ya nada me sorprende.
Sé que caminas entre muchos y sigues siendo igual al resto. No eres alto ni bajo. No eres gordo ni flaco. Eres promedio. Ni feo ni bello, eres promedio.
Deambulas por las calles, no pisas las baldosas, te asustan las mujeres, las miras a los ojos y finges no temerles. Eres hombre promedio.
Te muestras amigable, un tanto extrovertido...pero eres de cristal: te rompes fácilmente. Te precias de tener amigas. Crees que todas andan detrás de ti...pero la verdad es que secretamente sabes que te quedaste de amigo por pendejo...lo peor es que por dentro te sientes solo y vacío. Eres demasiado promedio: tu mejor amiga está rebuena y nunca ha pasado nada o, caso contrario, tu mejor amiga es inmunda y tiene novio. (Ojo, el hombre promedio siempre tiene una mejor amiga que es una bruja hedionda come hombres, pero a la cual siempre va a consultar - quizá porque ella en sí es un hombre AH! y digo hedionda porque así sea la mujer más bonita del planeta, siempre tendrá una actitud de "soy la más")
Eres hombre promedio. No eres niño ni adulto...eres un punto medio. No enfrías ni te calientas. Vas de un amor a miles y rondas por ahí.
Nada eres y en nada te convertirás.
Tu condena es ser nada...existes porque sí.
Te odio tanto.
Estoy tan cansada de ti.
O mejor,
estoy cansada de verte e imaginarme que podrías ser tu.
(...)
Después de meditarlo profundamente tan solo en un momento, se me ocurre que quiero el combo completo, que no quiero un hombre promedio. Que no quiero la ensalada de frutas sencilla. Quiero la especial con mucho queso y doble porción de helado. Y es que, si yo fuera la ensalada sencilla, tal vez estaría bien estar con otra ensalada sencilla...pero como soy la especial, la de 5000, la que lo trae todo, me merezco la mejor.
¿Para qué coca-cola habiendo whisky?
Sé que caminas entre muchos y sigues siendo igual al resto. No eres alto ni bajo. No eres gordo ni flaco. Eres promedio. Ni feo ni bello, eres promedio.
Deambulas por las calles, no pisas las baldosas, te asustan las mujeres, las miras a los ojos y finges no temerles. Eres hombre promedio.
Te muestras amigable, un tanto extrovertido...pero eres de cristal: te rompes fácilmente. Te precias de tener amigas. Crees que todas andan detrás de ti...pero la verdad es que secretamente sabes que te quedaste de amigo por pendejo...lo peor es que por dentro te sientes solo y vacío. Eres demasiado promedio: tu mejor amiga está rebuena y nunca ha pasado nada o, caso contrario, tu mejor amiga es inmunda y tiene novio. (Ojo, el hombre promedio siempre tiene una mejor amiga que es una bruja hedionda come hombres, pero a la cual siempre va a consultar - quizá porque ella en sí es un hombre AH! y digo hedionda porque así sea la mujer más bonita del planeta, siempre tendrá una actitud de "soy la más")
Eres hombre promedio. No eres niño ni adulto...eres un punto medio. No enfrías ni te calientas. Vas de un amor a miles y rondas por ahí.
Nada eres y en nada te convertirás.
Tu condena es ser nada...existes porque sí.
Te odio tanto.
Estoy tan cansada de ti.
O mejor,
estoy cansada de verte e imaginarme que podrías ser tu.
(...)
Después de meditarlo profundamente tan solo en un momento, se me ocurre que quiero el combo completo, que no quiero un hombre promedio. Que no quiero la ensalada de frutas sencilla. Quiero la especial con mucho queso y doble porción de helado. Y es que, si yo fuera la ensalada sencilla, tal vez estaría bien estar con otra ensalada sencilla...pero como soy la especial, la de 5000, la que lo trae todo, me merezco la mejor.
¿Para qué coca-cola habiendo whisky?
3 comentarios:
ushhh asi o mas de mal genio??
calma que ya prontito llega tu cumple!
pero que arrastrada que nos pegaste, no hay derecho!
No entiendo ké tiene ke ver mi cumpleaños con el post... de mal genio no, el tono se lo pone el lector... y en cuanto al "nos pegaste" ke conste ke yo no clasifiké a nadie...
Vida catre, soy promedio, que mala pata.
Saludos.
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